Pinocho, un ataque a la nostalgia en pleno 2022

En un pequeño pueblo italiano la magia surge y un muñeco inanimado, hecho con pino y mucho amor, cobra vida gracias a los deseos de un anciano que añora compañía. Pinocho es el fruto de la tristeza, de la soledad, pero también de la magia, del valor y de los deseos de Gepetto por recuperar el cariño que alguna vez tuvo. Disponible en la plataforma de streaming de Disney+, Pinocho es un flechazo a la nostalgia para aquellos que crecimos con los clásicos de Disney.

En formato entre animación y realidad Pinocho vuelve a llenarnos de ternura y sentimientos encontrados, de enseñanzas a las que quizá estuvimos inconscientemente condicionados tales como el cariño y respeto hacia los padres, las dificultades para hacer verdaderos amigos, para escuchar a esa vocecita que vive en todos nosotros mejor conocida como conciencia y para afrontar las consecuencias que surgen de ignorar nuestros instintos.

Pinocho vuelve para dejar sus enseñanzas a las nuevas generaciones que tendrán la oportunidad de ver la vida de un muñeco hecho de madera de pino, pero con tantas ganas de ser tan real como él mismo lo permita. Plumbagos te cuenta un poco más de este ataque a la nostalgia.

1.- Pinocho y Gepetto

Parece que el papel de Gepetto en este live action de Pinocho le quedó como anillo al dedo a Tom Hanks, un hombre tan camaleónico que nos conmovió hasta los huesos en esta versión de Pinocho, mientras lo veíamos rogar a todos los poderes del cielo por recuperar un pedazo de la vida pasada de un hombre que vive solo, con la compañía de un simpático gato llamado Fígaro y un pez mudo bautizado como Cleo. Pero la historia de Gepetto tiene un matiz bastante triste.

Anteriormente en la película animada Pinocho de 1940 –sin duda ese Pinocho es de los clásicos de Disney más queridos y recordados- pudimos ver a un Gepetto menos solitario, ahora en esta nueva propuesta algunos matices y temas como la muerte tocaron la puerta de Pinocho en su versión live action. Al parecer Constanza la esposa de Gepetto y su hijo pequeño murieron por alguna causa desconocida, quedando solo el pobre hombre relojero.

A ciegas, Gepetto pide un deseo a una estrella en el cielo y el muñeco que había fabricado, a base de madera de pino, cobra vida gracias a los poderes mágicos de un hada. Gepetto feliz, vuelve a recuperar una pizca de su antigua vida gracias al amor que le inspira este muñeco parlante que tiene mucho parecido con su hijo fallecido. La edad no es impedimento para que uno vuelva a buscar la felicidad. 

2.- Pinocho y la inocencia de la infancia

Las aventuras de Pinocho se dan rienda suelta una vez que este pequeño personaje de madera sale al mundo exterior, al desamparo de la crueldad de los oportunistas, pero también a la crueldad que existe en otros niños. Es descorazonador ver el destino de algunos niños en la película, pero esto es una analogía bastante clara cuando hablamos del amor y cariño que los padres dan a sus retoños, la confianza que depositamos en los niños y nuestras expectativas ante una criatura que apenas comienza a entender lo que lo rodea.

Pinocho sabe poco de todo, o sabe nada de mucho, pero el cariño que Gepetto le dio siempre fue una inspiración moral que guía a Pinocho, eso y un pequeño grillo que funciona como su conciencia y cuando este grillo se aleja de Pinocho, nuestra marioneta animada favorita se mete en los peores líos. Una clara advertencia para los padres que dejan solos mucho tiempo a los pequeños, los inocentes pequeños.

Las películas de Disney siempre, siempre, tienen un poderoso mensaje, pero no lo hay tan majestuoso cuando hablamos del desarrollo de la personalidad de un niño, de sus anhelos, de su ignorancia que necesita un faro de luz como guía y Pinocho nunca está solo.

3.- Pinocho y la conciencia

En defensa de Pinocho, tuvo muy poco tiempo para ampliar y desarrollar una conciencia que lo hiciera saber que es lo malo y que es lo bueno y es que no estamos hablando de un adulto que toma decisiones por sí solo, que decide por sí solo sino de un pequeño que ignora que afuera las oportunidades no siempre son lo mejor. Pinocho no sabe que las oportunidades están hechas para otros cuando alguien se aprovecha de la inocencia y la ignorancia.

Derivado del poco tiempo que aprendió de Gepetto sobre el amor, el afecto, el respeto y la obediencia, Pinocho se inclina a mirar lo mejor de las personas, a ver lo mejor de aquellos que nos rodean. Mucho le faltó aprender para que Gepetto lo dejara salir solo a un mundo rancio y oportunista, pero la voluntad de Pinocho, su conciencia, siempre estuvo a su favor y al final, como todos ya sabemos, su conciencia rindió frutos porque pudo salvar a su padre, a sus amigos y a él mismo, lo más importante.

4.- Las aventuras de Pinocho

Si no lo sabías, a finales del siglo XIX el escritor italiano Carlo Collodi publicó en estantes de librerías una pequeña novela infantil titulada Las aventuras de Pinocho (Le Avventure di Pinocchio) donde se extrajo todo lo fundamental para que Disney pudiera crear uno de sus clásicos mejor recibidos y más entrañables: Pinocho.

El cuento ha tenido un sinfín de adaptaciones, obras de teatro, películas, ballet y operas, pero en todas sus presentaciones las aventuras de este singular niño hecho de pino nos terminan divirtiendo e impresionando. La enorme bestia que acecha en los mares y engulle a Gepetto y a Pinocho, la isla de los juegos que es un lugar tan peligroso como dulce y la tétrica caravana de marionetas en la que Pinocho es apresado, por breve tiempo. 

Sin duda la versión live action de Pinocho recogerá más fandom, pero también nos traerá recuerdos de una infancia menos cruda y más risueña. Algunos cambios por aquí y acullá han hecho que las nuevas generaciones sientan más empatía por un niño de madera que se aventura en un mundo cruel, mágico y dulce.

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